El mercado de bajos precios en el la hostelería, en la oficina o en el hogar tiene consecuencias inevitablemente destructivas…si vemos en perspectiva, este sistema marca que un árbol de café vale más muerto que vivo o que una ballena vale más muerta que viva o que sacamos petróleo aunque dejemos morir la tierra.
Vivimos en un mercado de café poco regulado y de esto se aprovechan todos… alguna empresa con conocimiento de causa y muchos consumidores sin saberlo…
Si seguimos así, dejaremos un mundo peor para las generaciones futuras.
Esta forma de pensar a corto plazo acaba con muchos proveedores vendiendo solo a bajo precio y cerrando a medio plazo.
Esto ha alterado el ambiente durante muchísimo tiempo y es verdad que el escenario de office coffee service o el bar importa, es verdad que la experiencia de usuario con sillas cómodas y buena iluminación es importante, pero no deja de ser el mensajero… prestemos atención al mensaje… «el café « ….
La iniciativa de modelo de precios desarrollada para ayudar a los caficultores a obtener un ingreso digno y establecer una industria cafetera más equitativa no tiene marcha atrás.
Nos hemos dado cuenta que, los contextos sociales y ambientales más adecuados son aquellos con una base económica sólida donde prosperan la viabilidad, la rentabilidad y las oportunidades.
«POR FAVOR, no compres cafe barato»